Ser madre, no es fácil. Levantarse temprano para preparar el desayuno, llevar a los niños a la escuela, ir de compras, preparar la comida, educar a los hijos, entre otras muchas cosas!
s. Es cierto que las responsabilidades de la casa deberían ser compartidas pero seamos sinceros, vivimos en una sociedad machista y patriarcal por lo que nuestras mamis terminan asumiendo la mayor carga; y no hay discusión, lo hacen mejor que nadie y con mucho amor.
Una madre adquiere muchas cualidades en los años de crianza de sus hijos que las vuelve aptas para desempeñar cualquier tipo de trabajo, entre ellos, el de agente inmobiliario. ¿No nos creen? Les dejamos a continuación diez razones por las que mamá sería una excelente agente inmobiliaria para que juzgue usted mismo.
TIENE UN AMPLIO CÍRCULO SOCIAL
Las madres se juntan con otras madres. Conocen otras familias. Familias que necesitan o llegarán a necesitar vender o comprar una casa. El negocio inmobiliario se trata principalmente de relacionarse, y ¿quién sabe relacionarse mejor que nuestras madres?
TIENE CARÁCTER
Vender una casa no es sencillo, y no nos referimos sólo a los trámites que esto implica sino al manejo de clientes. Durante la transacción se pueden presentar diferentes obstáculos, y se necesita carácter para asesorar a ambas partes sin que se caiga el negocio. A nuestras madres el carácter les sobra.
IMPONEN SU AUTORIDAD
¿Así que quiere ofrecer su propiedad a un precio muy superior al mercado? Pues acá el profesional es ella y se lo hará saber. Un buen agente inmobiliario le dice a su cliente la verdades aunque sea dura. Un buen cliente apreciará esta sinceridad.
SABEN NEGOCIAR
En algún momento o tal vez varias, su hijo ha pasado por una etapa de rebeldía. Una madre sabe que llevarle la contraria sería mucho peor y saben cómo lograr lo que ellas quieren sin que sus hijos lo noten. ¿Manipulación? Tal vez, pero siempre en beneficio de sus clientes.
INTUICIÓN DESARROLLADA
El sexto sentido no es un mito. Esa corazonada que sienten cuando algo no está bien sería de mucha utilidad en esta profesión que requiere de conocimiento y el doble de intuición.
SABE ESCUCHAR
Una buena madre conoce muy bien a sus hijos. La razón principal es que los escucha, se interesa en sus problemas y los aconseja. Un agente inmobiliario exitoso conoce muy bien a cada uno de sus clientes.
ES AGUERRIDA
Lo peor que le pueden hace a una madre es meterse con su hijo. Las madres son leonas que sacan las garras para defender lo que tanto aman, ¿imaginan que le pongan la tercera parte de esa pasión para vender y negociar su casa?
SON RESPONSABLES
Una buena madre es consciente de sus obligaciones y actúa conforme a ellas. Sabe las obligaciones que tiene con sus hijos y su familia. Pueden estar seguros que cumplirán lo que prometen.
SABE TOMAR DECISIONES
¿A qué precio salir? ¿a qué inquilino rentar el departamento? Una buena madre tiene determinación y no le tiembla la mano para decidir.
SON ORGANIZADAS
Se puede ser una exitosa agente inmobiliario sin descuidar el rol de madre, conocemos muchas colegas que empiezan el día muy temprano, atienden a sus hijos, cumplen sus citas, y no descuidan ni una de sus labores.
Así que ya lo sabe, si su agente inmobiliario es mamá, tienen mucha suerte pues es como dicen “Mamá sabe lo que es mejor para ti”
Fuente: http://peruinmobiliarios.com/